Un pequeño análisis de la situación actual
A pesar del clima de incertidumbre política en la que nos encontramos, parece que las cosas no van mal del todo, pero la realidad es que si el entorno no acompaña pueden ir a peor. La situación tampoco es que sea para tirar cohetes, aunque tampoco los próximos meses serán para inmolarse, pero mejor es que empecemos a pensar en cómo atraer a más clientes de aquí al verano, pues el consumo se puede retraer esta primavera. Tras la Semana Santa y hasta las vacaciones de verano seguro que muchos de nosotros vamos a mirar el euro algo más, gastando con menos alegría y nuestros clientes seguramente se vayan a comportar de la misma manera.
Los datos de consumo y confianza
Si nos atenemos a unos datos de consumo, por ejemplo, comparando los índices de ventas del sector minorista de Febrero 2016 versus Febrero 2015, en España se ha facturado un 7,4% más, mostrando su mayor repunte de toda la serie histórica, iniciada en el año 2.000 y 5,5 puntos por encima del mes anterior, según los datos publicados este mes por el Instituto Nacional de Estadística. El crecimiento corregido de los efectos estacionales y de calendario, es decir, la diferencia de días hábiles entre meses, fue del 3,9% respecto al mismo mes del año anterior, seis décimas más que en enero, encadenando 19 meses consecutivos de mejora. En cuanto a comunidades autónomas, la facturación del comercio minorista se incrementó en todas ellas respecto al mismo mes del año anterior. Los repuntes más significativos se registraron en Baleares (+11,6%) y Comunidad Valenciana (+9,4%). Por otra parte, las menores subidas se dieron en Castilla-La Mancha (+5,2%), Cataluña y País Vasco (ambas con un 5,3%).
Si observamos la tasa de ahorro de los españoles, ésta ha disminuido versus el año anterior un 29%, es decir, ahorramos menos y gastamos más, no necesariamente en consumir, también hay que pagar impuestos (+1,7%.), colegios, medicinas, etc. El Instituto de Estadística razona que en el tercer trimestre del año los hogares españoles ahorraron menos que en igual periodo del año pasado porque su gasto en consumo fue un 3,1% superior.
Si por último atendemos al Índice de Confianza del Consumidor, es decir, la confianza en la situación económica actual por parte de los consumidores, el índice ha bajado 8 puntos de Marzo 2015 a Marzo 2016. Y si nos centramos en el Indicador de Expectativas (las perspectivas a futuro de lo que creen los consumidores que harán con su dinero con respecto a sus compras), la caída es de 14 puntos. Eso se traduce en que los españoles vamos a ahorrar (lo que se traduce en gastar menos) ahora un poco más, por si acaso, y que no nos quedemos sin dinero para las vacaciones de verano por culpa del entorno económico, incierto, austero y hostil.
¿Y el tabaco?
Pues acumulado a Febrero y comparándolo con el mismo periodo del año pasado, se han vendido algo más de cigarrillos (+0,97%), pero menos cigarros (-4,8%) y algo menos de picadura (-3%) . El tabaco de pipa también se vendió algo menos (-3%). Las marcas líderes de cigarrillos, como Marlboro (+10%), Lucky Strike (+8,45%), Camel (+1,88%) y Winston (+0,84%), han aumentado sus ventas en este periodo de Enero-Febrero con respecto al mismo periodo del año pasado. Destacan por su buen comportamiento las marcas West Brooklyn (+36,3%) y Phillip Morris (+150%), mientras que muestran caídas de ventas relevantes las marcas Ducados Rubio (-12,2%) y Ducados Negro (-1,6%), Nobel (-4,7%), Fortuna (-4,7%) y L&M (-2,4%).
La subida de cigarrillos es muy pobre y viene aupada sobre todo por las grandes marcas (Marlboro, Lucky Strike y Camel, además de West Brooklyn), que crecen más que el total del mercado y aportan muchos cigarrillos a la cuenta total (25 millones de cigarrillos o 1.275.550 de cajetillas, entre esas cuatro marcas). Otra buena noticia es que aunque crecen pocas marcas, lo hacen las que mayor contribución tienen en euros, al tener un PVP más alto de las que decrecen, a excepción de West Brooklyn que con un precio bajo crece bastante, sobre todo porcentualmente.
El que las ventas de cigarrillos crezcan, dada la situación económica en la que estamos y la más que posible futura retracción del consumo en los próximos meses, no deja de ser una buena noticia. Esperemos que no nos estropeen estos próximos meses con más ruido innecesario en forma de legislaciones obsoletas. Por lo menos, la ausencia de gobierno nos aleja, de momento, de una subida de impuestos. Si bien, en cuanto tengamos nuevo gobierno, preparémonos todos, pues tenemos un déficit importante y el futuro ministro de economía tendrá que encontrar (o sea, sacar) unos veinte mil millones de euros de donde sea y ya sabemos todos que el tabaco es una de las principales fuentes de ingresos públicos.
